jueves, 11 de diciembre de 2008

Reportaje

Contraste en Bellavista: ¿Modernidad o tradición?

Grandes cambios están planeados para el barrio Bellavista con la llegada del Bicentenario. Nuevos proyectos que prometen mejorar la calidad de vida de sus residentes, con el embellecimiento de calles, paseos y fachadas. El problema es que con la renovación desaparecerá un patrimonio que forma parte de la historia del país.

Este año, octubre tuvo un comienzo diferente para los vecinos del barrio Bellavista. Un debate entre los postulantes a alcaldes por la comuna de Recoleta, convocado por la Junta de Vecinos N°35 de ese sector, causó gran expectación entre los habitantes. Mientras un gran número de personas esperaba atento para poder escuchar a Francisca Zaldívar (DC), Daniel Jadue (PC), y Sol Letelier (UDI), para informarse acerca del plan de trabajo que cada candidato proponía para el barrio.
A las once de la mañana del viernes 3 de octubre se dio inicio al debate en la escuela Juan Verdaguer Planas. Pese a que la candidata de la Alianza por Chile no pudo asistir al evento, los vecinos escucharon atentos los objetivos que, tanto Zaldívar como Jadue, tienen incorporados en sus propuestas para el barrio. Según el presidente de la Junta de Vecinos, Gerardo Lanzarotti, ambos candidatos coincidieron en algunas promesas, y “aseguraron a la población el
cumplimiento de ellas”.

Un compromiso que quedó registrado en una grabación que Lanzarotti guarda hoy en su domicilio. Dice que le servirá para, en el futuro, hacer presión sobre el cumplimiento de éste, ya que hasta ahora, “las autoridades han hecho vista gorda a todas nuestras peticiones de cambio”.
Gerardo Lanzarotti <<

En este sentido, la candidata de la Concertación, Francisca Zaldívar, recalcó estar al tanto de los problemas que existen en el barrio Bellavista y que hoy “tienen muy afligidos a los residentes”. Es por esto, que una de sus propuestas es trabajar directamente con los vecinos y, juntos, buscar soluciones.

El problema
Sin embargo, el motivo que actualmente angustia a los residentes, es un proyecto que ya no tiene vuelta atrás. Se trata de la construcción de dos universidades (Andrés Bello y San Sebastián), más un edificio que ofrecerá cerca de 1.050 departamentos, “lo cual implicará una transformación del barrio: de ser un sector gastronómico, pasará a convertirse en un polo universitario en la capital”, afirma Lanzarotti.
La Universidad Andrés Bello espera recibir a más de 2.200 estudiantes en su Facultad de Ciencias Jurídicas, que se está edificando detrás de la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile. Por otra parte, en el lugar donde se encontraba el Liceo Alemán, hoy se construye la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad San Sebastián, la que ocupará toda la manzana entre Pío Nono y Ernesto Pinto Lagarrigue.

Pero a un costado de esta construcción, se encuentra la iglesia del Liceo Alemán, calificada como Inmueble de Conservación Histórica. Ésta data de 1914 y deberá ser conservada por la universidad.
A esto, se suma la construcción de “Bellavista Forestal”: dos torres colindantes, situadas en Dardignac, detrás de lo que será la Universidad San Sebastián. Cada una constará de 19 pisos, cada uno de los cuales tendrá 10 departamentos de una o dos habitaciones. Eso, además de cuatro subterráneos.

Estas construcciones tienen intranquilos a los vecinos de Bellavista, dicen que la llegada de los 6.200 estudiantes, más las personas que habitarán los casi 1.050 departamentos significará un gran impacto vial en la zona. Temen, también, por el impacto ambiental y cultural que provocaría tanto edificio.

Con respecto al impacto ambiental, la Comisión Regional del Medio Ambiente de la Región Metropolitana, ya aprobó el proyecto inmobiliario de “Bellavista Forestal”, pero el proyecto de las universidades, “no ha ingresado a evaluación ambiental”, según señala Annie Kutscher, encargada del área de comunicaciones de la Corporación Nacional del Medio Ambiente (CONAMA Metropolitana). Así y todo, la construcción de ellas ya comenzó.

En el caso del impacto vial por el que temen los vecinos del barrio, las inmobiliarias (Banmerchant y Andrés Bello), intentan bajar el perfil, y afirman que “además de los dos subterráneos de estacionamiento que tendrán ambas torres de departamentos, en la Plaza de los Artesanos se habilitarán alrededor de 600 estacionamientos”. Así lo señala Jorge Parra, encargado de informaciones de “Bellavista Forestal”.

Esto es precisamente lo que tiene preocupados a los artesanos de la plaza ubicada en frente a la Universidad de Chile. “Pero confiamos en que las autoridades saben la importancia cultural que tiene este lugar. Si quieren hacer estacionamientos, este sector debiese ser remodelado, pero no eliminado”, aclara Denis Fortoul, quien trabaja hace cinco años en el lugar, vendiendo pinturas que él mismo hace.

La comuna
Según encargados de la Secretaría Comunal de Planificación (SECPLAC) de la Municipalidad de Recoleta, todos los proyectos inmobiliarios que se están llevando a cabo en el barrio Bellavista, están aprobados por la Dirección de Obras del municipio.
Pero por parte de la Junta de Vecinos N°35 de la comuna, Gerardo Lanzarotti manifiesta que estos proyectos no son más que un “atropello de las grandes inmobiliarias, que vienen a destruir más que a construir”. Él se refiere a que estos proyectos significarían la destrucción del patrimonio que conserva el barrio. Un barrio que tiene historia, pero que “si sigue así, tendrá una pronta desaparición”, asegura.


La candidata a alcaldesa, Francisca Zaldívar, afirma que “hoy se está pensando en Bellavista como un negocio, más que como un lugar para vivir y de calidad”. Y concuerda con la mayoría de los residentes del barrio, quienes defienden sus anhelos de conservar el patrimonio y la historia del lugar. Ellos miran con repudio los carteles de propaganda de la inmobiliaria, que dicen: “Bellavista Forestal, un nuevo barrio”.
>>Francisca Zaldívar

Estos avisos ocultan las profundas excavaciones que hay en el lugar donde estaba el Liceo Alemán. Sin embargo, cada vez que se abre el portón para la salida de los camiones de la construcción, se logra escuchar el grito de algún vecino, afirmando que “van a hundir el cerro San Cristóbal con tanta torre”. Eso deja en evidencia el disgusto que sienten muchos por el futuro que están imponiendo en Bellavista.

Para evitar que las autoridades aprueben nuevos proyectos, los vecinos del barrio han decidido organizarse, y unirse la junta de vecinos que hoy agrupa a más de 300 residentes. El objetivo es “gritar a viva voz que somos personas, y que el tener poder no les da derecho de pasar por sobre nosotros”, afirma Lanzarotti.

¿Qué es lo que más te atrae del barrio?